Depresión y ejercicio ¿Mito o verdad?

Ya no vale poner excusas, ni creer que el ejercicio físico te pone de mal carácter con solo pensar que tienes que que abandonar tu sofá por ir a mover tu cuerpo serrano. La American Psychological Association ha publicado un artículo (“The exercise effect”) donde se recogen los beneficios que provoca el ejercicio físico en el estado cognitivo, anímico y en la salud mental.

De hecho, no solo el ejercicio físico disminuye los síntomas de la depresión, si no que, además, hay estudios que avalan que realizar ejercicio físico supervisado puede llegar a tener los mismos efectos que provocan los medicamentos antidepresivos en los pacientes.

Otros estudios han demostrado que a mayor ejercicio físico tanto aeróbico como de fuerza, hay menos degeneración neuronal. Y en caso de pacientes ya afectados, el ejercicio mejora las funciones cognitivas y se frena el deterioro.

¿Qué es el deterioro cognitivo?

Es el proceso que todos sufrimos debido al envejecimiento, aunque esté puede verse aumentado si se padece demencia. Los problemas que esto puede acarrear son pérdida de memoria, peor toma de decisión y juicio, lenguaje menos fluido… Esto es debido a que el centro de la memoria (hipocampo) se va disminuyendo.

¿Qué es la neurogénesis?

Es el proceso natural de creación de nuevas neuronas en el hipocampo a partir de células madre. Antiguamente se creía que nacíamos con cierto número de neuronas y con ellas moriríamos, sin embargo, la ciencia avanza y se ha demostrado que incluso cuando somos adultos podemos crear neuronas a través de la neurogénesis.

A raíz de que diferentes investigaciones demostraron que personas que realizan una mayor práctica de ejercicio físico tenían un hipocampo de mayor tamaño, se buscaron las causas, que a continuación veréis:

En resumen, el ejercicio físico es la mejor herramienta para mejorar estados de ansiedad, mejorar tu autoestima, dormir bien, sentirte a gusto contigo mismo y lo mejor de todo es que depende solo de ti.